Ayer mismo llegue del viaje de una semanita que hemos estado de vacaciones por tierras extremeñas. Me he perdido dos días de caza pero ha merecido la pena ya que he podido estar con los amigos y hacer una visitilla a Del Campo Arañueño y su agradable familia.

Como digo, ayer vine del viaje y poco tardó el amigo Yomismito en decirme que si a la propuesta de dar una vuelta al coto hoy domingo.

Quedamos algo más tarde que de costumbre ya que los días poco a poco se van acortando y tarda más en salir el sol.

Tras tomar el obligado cafe con tostadas nos ponemos rumbo al coto.

La zona que vamos a dar hoy no la ha visto Yomismito aunque se entra por el mismo sitio al cazadero... Son olivares con pequeñas manchillas de pasto y un barranquito muy bonito donde la última vez que pasé con mi primo nos hicimos con varios conejos.

Nada más empezar ya vemos los primeros conejos correr delante nuestra... Aun habiéndolos tenido mejores para disparar me voy con uno que al final se va de rositas.

Seguimos andando y vemos como la densidad de conejo ha disminuido... Normal si nos ponemos a pensar que es domingo y esa zona la hemos castigado mucho estos últimos días.

Andamos un ratillo hasta que por fin me hago con el primer conejo de la mañana...Han salido dos, pero he disparado solo a este.

Continuamos en dirección al pequeño barranquillo cuando escuchamos un tractor que está quitando el pasto de los pasillos de los olivos que rodean dicho monte.

Nos damos la vuelta y buscamos la zona de siempre donde es prácticamente seguro que nos haremos con algún que otro conejo... Ahora son dos cazadores los que vemos que bajan por la zona que queremos dar. Esto ya es mala suerte tio!! Que hacemos ahora??

Nos arriesgamos y nos vamos a la zona que queríamos ir por si no hubieran pasado ellos por.

Antes de llegar vemos un bonito bando de perdices con ocho perdigones del tamaño de una codorniz. Este año parece que promete.

Estamos llegando a la zona que nos gusta... Nos asomamos a un pequeño barranquito y empiezan a salir conejos por todos lados... Me puedo hacer con un doblete pero fallo el segundo conejo... Por la cara de enfrente suben unos pocos pero están lejos y no consigo hacerme con ninguno más. Si estos conejos están aquí quiere decir que no ha pasado nadie.

Seguimos andando por el filo del barranquillo cuando se arranca un conejo directo al perdedero... Me voy con él y cae.. Al tiro se arranca otro y con un rápido disparo, el conejo se queda... De nuevo sale otro pero se tapa corriendo y no me da oportunidad alguna... Bonito doblete...

Le doy la escopeta a Yomismito mientras yo bajo a por ellos... Le digo que se vaya para el otro lado del barranco por si levanto algún conejo al ir a cobrar los dos que han caído... Tras buscar y buscar solo soy capaz de encontrar uno solo, el otro lo mismo se ha metido en alguna boca con las patas partidas.

Bajamos ahora por un montecillo bonito donde siempre he tirado alguno... Se arranca un conejo de una de las matas y no se como lo he hecho pero ha caído fulminado... Al ir a recogerlo se arranca otro de los pies y también consigo quedarme con él... ¡¡Vaya dos lances bonitos!!

Damos ya la vuelta hacia el coche, pero antes pasamos por una zona de olivos con pasto donde siempre he visto conejos... No andamos mucho cuando Yomismito, que llevaba la escopeta, ve una perdiz sola cerca del pasto... Me avisa para que la grabe pero no vemos ni pollos ni nada... Él se dirige a ella mientras yo voy por la otra calle grabando por si sale a correr o volar con los perdigones y así poderla grabar bien... Nos vamos acercando cada vez más y la perdiz no la vemos... Rápido me dice Yomismito que la tiene delante aplastada en el pasto... Que fuera rápido para poder grabarla... Me doy la vuelta cuando se arranca una liebre grande como un perro a pocos metros de mí... Y eso que había pasado por el mismo sitio hace escasos segundos... ¡¡Hay que ver lo que aguantan!!

Voy hacia donde está Yomismito y me señala el sitio donde está... Veo la sombra y me voy hacia ella muy despacito para grabarla bien... Tanto me acerco que casi puedo cogerla!! Se arranca corriendo pero se queda a pocos metros de nosotros nerviosa... Que le pasa a esa perdiz?? Nos preguntamos sin saber muy bien lo que está pasando... Está herida?? Es un pollo?? Pero es adulta y no parece herida... Hay que decir que en el coto no se ha repoblado nunca.

Comentamos que cuando hace eso una perdiz quiere decir que tiene cerca el nido o los pollos que son muy pequeños para que te fijes en ella y así salvar a la pollada... Pero es que esta perdiz ha sido muy temeraria ya que he estado apunto de cogerla. Vamos un poco detrás de ella y vemos como va haciendo un rodeo y finalmente cuando estamos algo lejos, vuelve al mismo sitio... Hay que ver lo que son capaces de hacer para proteger a su pollada... No hemos visto ni pollos ni nido pero seguramente los tuviera cerca, por que otra explicación no tiene.

LLegamos al coche y aun siendo un poco tarde insisto en enseñarle una zona de monte que él no ha visto.

Nada más dejar el coche y andar un poco vemos los primeros conejos que se escurren en pequeñas manchas de pasto.

Vamos ahora bordeando una fila de monte con mucho conejo pero misteriosamente no vemos ni uno... Hasta que al rato de ir andando escuchamos varios disparos delante nuestra...

Nos bajamos cruzando el monte para cazar el pasto de un arroyo que está paralelo al monte... Pocos conejos se ven pero tirando alguna piedra que otra conseguimos que salgan y tirar alguno que otro.

Vamos arroyo arriba fallando y cobrando algún que otro conejo... Hay que ver lo que cuesta sacarlos del pasto...

LLegamos al final y ahora si que nos vamos dirección al coche que son las once y poco y aunque corre una brisa muy buena, el sol está pegando bien.

Pocos conejos se ven ya pero alguno que otro se deja ver e incluso tirar.

Por fin llegamos al coche sobre las doce del medio día... Hemos aguantado hoy un poco más y se nota el calor.

Ha sido una mañana bonita a pesar de ver menos caza que en días anteriores... Aun así hemos podido hacernos con unos cuantos conejillos y quedarnos con la anécdota de la perdiz, que estoy seguro que ni a Yomismito ni a mí se nos va a olvidar.

Video: